TPP Acuerdo Estratégico Trans-Pacífico de Asociación Económica (más)
De acuerdo con el borrador, incorporar el tema de los derechos de propiedad intelectual al TPP busca dar más “relevancia al papel de la propiedad intelectual en promover el desarrollo económico y social, particularmente respecto de la nueva economía digital, innovación tecnológica, transferencia y el intercambio de tecnología y comercio”.
La regulación de la propiedad intelectual en el TPP, según el documento, pretende reducir las barreras al comercio y la inversión a partir de promover una integración económica más profunda mediante una efectiva y adecuada creación, utilización, protección y legislación de los derechos de propiedad intelectual, tomando en cuenta los diferentes niveles de desarrollo económico, así como la capacidad y las diferencias de los sistemas legales nacionales.
Mientras no hay información respecto del nivel de conocimiento que el público y los congresos de los países tienen sobre el alcance de la reglamentación del uso en Internet planteada en el TPP, por lo menos 600 compañías estadunidenses, incluidas de tecnología, farmacéuticas y de alimentos, tienen acceso al proceso de negociación y brindan consejos sobre las políticas, aseguró Burcu Kilic.
El borrador que recoge el proceso de negociación de los 12 gobiernos establece que los países deberán limitar la disponibilidad o establecer acciones contra los proveedores de servicio de Internet (PSI) que permitan que circulen por sus redes contenidos que infrinjan los derechos de autor, o derechos relacionados, que hayan sido subidos a la red por otras personas y sobre los cuales el autor haya reclamado los derechos.
La regla negociada en el TPP se aplicaría a contenido protegido por derecho de autor en los casos en que el PSI lo transmita, lo hospede en su red o lo conserve en sus sistemas. El documento señala que habría incentivos legales para que los PSI acaten estos procedimientos o acciones contra los PSI que no lo hagan. Según el borrador, el gobierno canadiense propuso incluso que sean removidos los materiales o que se limite el acceso al contenido.
Otra de las restricciones contenidas en el borrador es que ninguno de los países que participen en el TPP puede permitir la retransmisión de señales de televisión abierta por cable o satelital mediante Internet sin autorización del o los propietarios de los contenidos.
Claudio Ruiz, presidente de la organización chilena Derechos Digitales, explicó que estas medidas crean nuevos derechos que en la esfera internacional no han tenido consenso durante los 15 años recientes, como es el uso de contenidos. Se aumentan los plazos de protección en materia de derechos de autor hasta casi duplicar los estándares internacionales y crea nuevos derechos que no existen en ningún instrumento de propiedad intelectual, que pueden significar serias desventajas para el acceso al conocimiento y la cultura.
Propuesta controvertida
El borrador recoge la propuesta de los gobiernos de Estados Unidos, Australia, Singapur, Nueva Zelanda y Perú para que se creen los mecanismos legales que permitan una acción efectiva contra cualquier violación a los derechos de autor considerados en el documento, incluidas acciones expeditas para prevenirlas, así como la posibilidad de imponer sanciones penales y civiles. A esta propuesta se oponen Brunei, Vietnam, Canadá y México.
El texto incluye propuestas inspiradas por Hollywood y la industria de la música para limitar la libertad de Internet y el acceso a materiales educativos, con la finalidad de forzar a los proveedores de Internet a actuar como quienes vigilan los derechos de autor y cortan a la gente el acceso a Internet, dijo Burcu Kilic.
Estas propuestas no son populares en el mundo y han llevado a una parálisis en la negociación. Será muy difícil que concluya, porque hay más de cien diferencias entre los negociadores.
Las propuestas contenidas en el borrador avanzan en la dirección que llevaba la llamada Ley para detener la piratería en línea, conocida como SOPA, afirmó Claudio Ruiz a La Jornada.
Las siglas SOPA hacen referencia a una iniciativa que surgió en el Congreso de Estados Unidos en 2011 y que tenía como finalidad expandir al mundo las atribuciones de la ley estadunidenses para combatir el tráfico de contenidos con derechos de autor y bienes falsificados a través de Internet.
El documento filtrado es el capítulo relacionado con Propiedad intelectual y fue producido y distribuido en agosto de este año, luego de la 19 ronda de negociaciones en Bandar Seri Begawan, Brunei. Los ocho medios y organizaciones a los cuales Wikileaks entregó el material son: La Jornada; Fairfax (Australia); CIPER y Derechos Digitales (Chile); New Zealand Herald (Nueva Zelanda), Knowledge Ecology International, McClatchy y Public Citizen (Estados Unidos)
Ver más información en el sitio dedicado a Wikileaks en La Jornada.
Enlaces:
Los cables sobre México en WikiLeaks
Sitio especial de La Jornada sobre WikiLeaks
FUENTE: La Jornada